Milhojas crujiente de calabacín y crema de Feta

Preparación

Precaliente el horno a 220 °C.

Extienda la masa y colóquela sobre una bandeja para horno cubierta de papel de horno. Con un tenedor, pinche la masa por todas partes.

Coloque una segunda lámina de papel de horno sobre la masa y cubra con otra bandeja para horno.

Hornee la masa durante 20 minutos en la posición intermedia del horno. Levante la bandeja superior para ver el color que va adquiriendo la masa. La masa debe quedar dorada y crujiente cuando esté lista. Si es necesario, déjela un poco más en el horno. Saque el conjunto del horno y espere un poco a que se enfríe.
Corte la masa cocinada en dos trozos iguales.

Mezcle la harina con un poco de sal marina, una pizca generosa de pimienta negra y el orégano seco.

Lave los calabacines y utilice un pelador para cortarlos muy finos. Quite la humedad de las rodajas con papel de cocina. Reboce las rodajas de calabacín con la mezcla de harina.

Ponga a fuego alto una freidora o una sartén grande con mucho aceite. Cuando el aceite esté caliente, eche una parte de las rodajas de calabacín en la freidora o la sartén; enseguida se dorarán. Utilice un tenedor grande para mover las rodajas de calabacín continuamente mientras se fríen. Es mejor freír los calabacines por pequeñas porciones para que queden crujientes.

Ponga las rodajas de calabacín fritas sobre papel de cocina para escurrir el aceite.

Para preparar la crema de Feta: Pase el queso Feta por una batidora pequeña junto con la leche y la mitad del yogur griego. Debe conseguir una consistencia cremosa, para poder verterla sobre la masa. Por lo tanto, si es necesario, añada un poco de leche. Meta la crema en una manga pastelera.

Utilice la batidora para preparar también la crema de chutney. Mezcle el resto del yogur con el chutney que haya elegido y un poco de zumo de limón recién exprimido y bata. Meta la sustancia en una manga pastelera.

Meta la tapenade en otra manga pastelera pequeña.

Para juntar todo: Coloque cuatro láminas de hojaldre horneado en una fuente. Esparza un poco de crema de Feta. Cubra con algunas rodajas de calabacín fritas y, después, coloque otra lámina de hojaldre encima. Repítalo. Cubra la última lámina de hojaldre con crema de Feta, bolitas de la crema de chutney y la tapenade.

Decore con algunas especias frescas y sírvalo con una ensalada verde.

Más recetas deliciosas